Viñas del Nant y Fall de Trevelin: Destino patagónico único para "exploradores" del buen vino

Viticultura extrema en medio de la patagonia que da como resultado vinos únicos, que han conquistado paladares en distintas partes del mundo. Entrevista a Sergio Rodríguez, su fundador.

Apreciar los extensos viñedos cubiertos por una fina capa blanca de hielo, en medio del Valle de Trevelin, en la Patagonia Argentina y degustar unos vinos únicos que incluso han sido reconocidos internacionalmente por su calidad, es parte de la experiencia que se vive al recorrer las Viñas del Nant y Fall.

Una reconocida productora vinícola pionera en Trevelin, provincia de Chubut, Argentina, que comienza a pensarse en el año 2009 cuando Sergio Rodríguez junto a su familia se trasladan a 12 kilómetros de este pueblo, sobre la ruta nacional 259 que lleva a hasta Futaleufú, de Chile.

Esto, bajo la motivación de continuar la tradición heredada por sus antepasados que elaboraban vinos a pequeña escala en el norte de Italia.

Sergio confiesa que en un inicio no tenía mucho conocimiento sobre el cultivo del vid y la elaboración de vinos, sin embargo el autoaprendizaje y la experimentación fueron esenciales para alcanzar la meta.

“Siguiendo la tradición familiar y mi pasión por la producción y el vino es que comencé esta idea. Y en diciembre del año 2010 plantamos nuestro primer cuadro de Pinot Noir, dos años antes del que nos siguió en esta actividad, lo cual hizo que seamos pioneros en el Valle de Trevelin”, comenta Sergio a Diario Binacional.

Uno de los principales desafíos, pero que a la vez hizo más estimulante el proyecto, fueron las condiciones extremas, ya que son bastantes conocidas las heladas que caen en Trevelin.

Además, hasta esa fecha no habían antecedentes de la actividad en el territorio, llegando a la conclusión de que la variedad ideal era el Pinot Noir, para que el vid alcanzara su máximo potencial en un ambiente extremo.

“Tenemos heladas en todo el periodo productivo, por lo cual parte de la investigación fue estudiar cuáles eran las tecnologías que se podrían aplicar para mitigar estos efectos y decidimos optar por un sistema anti heladas que consiste en varios aspersores que riegan las plantas, provocando un bloque de hielo sobre sí misma, con la aislación térmica de temperaturas menores a 0°c”, explica.

Esta novedosa estrategia no solo permite dar un vino complejo y especial, al obtener las mejores características de la fruta, sino también se logra un resultado que resalta por su calidad.

En 2016 logran lo impensado por muchos, tener su primera vendimia tras el fruto del esfuerzo y el impagable apoyo familiar.

“Fue el 17 de abril del 2016 cuando hicimos nuestra primera vendimia y en ese momento no solo marcamos un antes y un después en la historia productiva de nuestro valle, sino que corrimos la frontera sur del vino a nivel mundial”, recuerda con cariño Sergio.

Desde ese momento fundamental para Viñas del Nant y Fall, se abrieron las puertas para alcanzar nuevas metas, sumando cepas como el Riesling, el Gewürztraminer y el Sauvignon Blanc.

“Actualmente Trevelin cuenta con 14 viñedos, cuatro marcas de vino, ocho productores que ya están cosechando, seis bodegas, su propia indicación geográfica y un montón de premiaciones a nivel nacional e internacional por la calidad e identidad de sus vinos”, destaca Sergio sobre el desarrollo de la actividad en el territorio.

Un lugar con todos los servicios 

Con una mirada innovadora en el turismo, la familia Rodríguez decidió ampliar sus servicios con la creación de campings para motorhomes para compartir el paisaje natural y la tranquilidad del valle, siendo una idea muy bien recibida por la comunidad local y de visitantes internacionales.

“El 13 de diciembre de 2013 inauguramos el área de servicios para motorhomes, lo cual fue en su momento un servicio turístico totalmente innovador”, indica Sergio Rodríguez.

Junto con ello, Viñas del Nant y Fall a orientado sus servicios al etnoturismo con recorridos guiados en diferentes idiomas, donde el visitante puede conocer cómo nacen los vinos y los acertados pasos que han permitido a este viñedo desarrollarse ampliamente, en un territorio donde nadie antes se había atrevido a experimentar.

Por otra parte, cuenta con su propio restaurante, “Sangre Tinta”, que sorprende con exquisitas preparaciones.

Cinco Variedades

Actualmente, la viña familiar produce cinco variedades de vid Pinot Noir, Gewurztraminer, Riesling, Chardonnay y Pinot Gris. También se destacan sus elaboraciones de aceite de lavanda.

Analizando todo el recorrido que han realizado como familia para llegar hasta donde se posicionan hoy, Sergio comparte con Diario Binacional sus metas y desafíos.

“La meta es poder desarrollar y trabajar en una actividad que no sólo da placer sino que une a tres generaciones en el trabajo diario. Nuestro desafío es darle continuidad generacional a Viñas del Nant y Fall y que ninguno de nosotros seamos imprescindibles dentro del emprendimiento”, comenta.

Descubre más sobre Viñas del Nant y Fall, su innovadora producción, sus exquisitos vinos reconocidos y sus servicios enfocados en el agroturismo, siguiendo sus redes sociales como en facebook @vinasdelnantyfall.  e instagram: https://www.instagram.com/vinasdelnantyfall/

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